EN ESTE AUDIO SE PUEDE ESCUCHAR
EL TEMA PRINCIPAL DE LA PELICULA
INTERPRETADO POR KARINA
Y UN SEGUNDO TEMA TAMBIEN
DE LA PELICULA


CAMILO SESTO Y SU PASO POR LA ACTUACION


Título original: Los chicos del Preu



Año: 1967 (España)

Director: Pedro Lazaga

Productor: Pedro Masó

Guionistas: Pedro Masó, Rafael J. Salvia, Antonio Vich

Fotografía: Juan Mariné

Música: Antón García Abril

Intérpretes: Maria José Goyanes (Alejandra Jiménez Salvador ”la Talento”), Emilio Gutierrez Caba (Andrés Martín Alonso), Cristina Galbó (Loli), Oscar Monzón, Karina (Yolanda Baeza Márquez “Yoyo”), Pedro Díez del Corral (Josele), Marta Baizán (Mercedes Morales Serrano), Camilo Sesto [acreditado como Camilo Blanes], Alberto Closas, José Luis López Vazquez, Gemma Cuervo, Mary Carrillo, Margot Cottens, Pastora Peña, Luisa Sala, Carlos Mendy, Jose Orjas, Erasmo Pascual, Rafaela Aparicio, Manuel Gas, Alfonso del Real…

Sinopsis: La película sigue la vida de un grupo de jóvenes de los años sesenta que deben enfrentarse a su último curso de acceso a la universidad

“Chicos y chicas del PREU, que viven con la ilusión de conseguir, pronto aprobar, saben que alguna vez, con suerte lo pueden lograr”. Con la letra de esta canción de los Pekenikes interpretada por una adolescente Karina, comienza la cinta que nos ocupa, apoyada de imágenes en las que la propia cantante, como si de un video clip se tratara, corretea por las calles principales de Madrid junto al resto del plantel protagonista de actores. Y es que esta película pretendía retratar a la juventud española de la época, y su paso de la adolescencia a la madurez en un año tan decisivo como era el curso del Preu que antecedía a los estudios universitarios.



Esta película, que podríamos etiquetar como perfecta para programar en “Cine de barrio”, merece una especial atención por diversas razones. Ante todo por el retrato generacional que se realiza de la juventud de finales de la década de los sesenta, tomando para ello a un plantel de actores ya conocidos como Emilio Gutiérrez Caba o María José Goyanes y otros que provenían del mundo de la canción, como es el caso de Marta Baizán- aunque ya hiciese sus pinitos en el cine-, Camilo Sesto y Karina. A todos ellos hay que añadirles el dúo formado por Cristina Galbó y Pedro Díez del Corral, en su segundo trabajo juntos tras la exitosa Del rosa al amarillo, cuando tan sólo eran unos tiernos infantes.



Los chicos del Preu sería el extremo opuesto a la reciente Mentiras y gordas (2009), filme que retrata la juventud de hoy en día ofreciendo una visión totalmente desfasada y pesimista. En la comparación podemos advertir cuánto ha cambiado los valores de la sociedad: si en el filme de Albacete y Menkes se ofrece una visión llevada al límite de la frivolidad, sentando como base el sexo y las drogas, el de Lazaga se mueve en el polo opuesto, resultando demasiado amable, totalmente descafeinada y hasta cursi, sobre todo en aquellos momentos relacionados con el personaje de Emilio Gutiérrez Caba y su poca adinerada familia.

Karina es la pizpireta del grupo. La cantante tenía grandes dotes como actriz cómica; de hecho, llegó a participar en cinco películas.

Comparaciones aparte, la película de Lazaga no tiene más intención que la de entretener al público al que va dirigido, es decir, la juventud de la época, incluyendo para ello entre su reparto a dos futuros ídolos musicales que además interpretan un par de canciones de la corriente ye-yé, estilo que hacía furor entre los jóvenes de la época. Tal experimento parece que llegó a conseguir su propósito, ya que más de dos millones de espectadores se acercaron a verla al cine, catapultando a la fama a su plantel de actores. Y no solo eso, ya que además la cinta lograría distintos reconocimientos por parte de los Premios Nacionales del Sindicato, que correspondían a los actuales Goya, entre ellos a Emilio Gutiérrez Caba, María José Goyanes y al propio Pedro Lazaga..



                             Camilo Sesto entre sus padres de ficción.


A pesar de que por momentos llegue a caer en la españolada de turno – no en vano cuenta con la participación de los indispensables José Luis López Vazquez, Margot Cottens y Rafaela Aparicio -, el filme tiene algunos buenos momentos en los que logra alejarse de dicho estilo, como la divertida discusión generacional entre Marta Baizán y su madre, o la ira del personaje de la Galbó tras un desengaño amoroso, algo que será posteriormente castigado con crueldad en todo un arrebato moralista. Y es que no hay que olvidar que su guión fue escrito por Pedro Masó, quien años después retomaría el tema juvenil en Las adolescentes (1975) o Experiencia prematrimonial (1972), películas ambas cargadas del mismo tufillo moralizante.

A pesar de todo, el filme se ve impregnado de una gran frescura que consigue ser transmitida a través de su reparto coral – lástima que estén doblados en su gran mayoría- que da vida a una serie de personajes dispares y bien definidos, y que, además, seguramente, hará las delicias de los más mitómanos.





ESE MISMO AÑO AL IGUAL QUE EN LOS CHICOS DEL PREU JUNTO AL GRUPO LOS BOTINES PARTICIPA EN EL RODAJE DE LA VERSION ESPAÑOLA EL FLAUTISTA DE HAMELIN (PROTAGONIZADA POR EL CANTANTE ESPAÑOL MIGUEL RIOS)







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